El brutal homicidio del relacionista público Leonardo Martínez en la puerta de Pinar de Rocha evidenció la ausencia de controles por parte del Estado en las noches.
Martínez trabajaba para el boliche ubicado en Ramos Mejía pero no estaba registrado debidamente. Tampoco el patovica que resultó herido en el ataque. Los dos estaban en negro.
Fuentes de la actividad señalan que esta situación es posible por la falta de presencia de los organismos encargados de controlar la nocturnidad. En esa línea, describen un notorio parate de inspecciones durante los últimos cuatro años.
El debilitamiento de los controles tiene responsables claros: en primer lugar el ministerio de Trabajo bonaerense por la falta de inspecciones laborales, y en particular, del organismo responsable de controlar la habilitación de personal de seguridad: el RECAP.
El Registro Público de Controladores de Admisión y Permanencia (RECAP) está conducido por Roberto Balbini, un funcionario designado por la gestión de María Eugenia Vidal, que logró quedarse con el cargo ante el recambio de gobierno.
Balbiani es un protegido de Sergio Berni, el actual ministro de Seguridad provincial, que con estos casos suma nuevos cruces con la gestión nacional de Sabrina Frederic y Alberto Fernández.
En el seno de la actividad saben de la banca que brindó Berni a Balbiani, por supuestos negocios que esté último habilitaría de igual modo que sucedió durante la gestión de Cristian Ritondo durante el vidalismo.
Según pudo saber este medio, los recientes sucesos violentos en Provincia que desnudaron la falta de controles por parte del Estado no cayeron bien en el albertismo que no le temblaría el pulso para bajar al actual titular de Seguridad bonaerense, y en efecto dominó, al propio funcionario del RECAP.
Uno de los episodios que dejaron en evidencia el puesto de decoración de Balbiani fue el ataque de un patovica a un hombre en Balcarce y los conocidos sucesos de Le Brique en Villa Gesell.
En ninguno de los casos los trabajadores estaban habilitado por el RECAP, el organismo encargado de controlar y que depende de Seguridad. Estos hechos son vistos como «fracasos» de la gestión y la salida de Balbini sería inminente.
El RECAP debe actuar en torno a la Ley provincial 13964, en adhesión a la Ley Nacional de Espectáculos Públicos 26370, que regula la actividad de control de admisión y permanencia.
La legislación establece que el personal que desee desempeñar funciones en la actividad debe estar capacitado y con carnet habilitante expedido por el propio RECAP.
La realidad es que al día de la fecha cientos de trabajadores que realizaron el curso de formación profesional correspondiente esperan sin resultados la habilitación correspondiente, mientras «patovicas» violentos sin formación alguna continúan atacando contra la integridad física de los concurrentes sin ningún tipo de control del Estado.
