El asesinato de Dmitri Amiryan, el ciudadano armenio que perdió su vida a manos de un joven de 15 años, puso en el centro de la escena la realidad de la peor comuna de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: el área comprendida por Retiro, San Nicolás, Monserrat, Puerto Madero, San Telmo y Constitución, que está bajo la coordinación de Lucas Portela, sería el principal foco del problema de la gestión actual.
¿Pero por qué no se habla de lo complejo de la Comuna y su conducción? Lucas Portela, el nombre sobre el que recaería la responsabilidad, es hombre directamente ligado a Diego Santilli: fue secretario privado del vicejefe de Gobierno de 2015 a 2019 -antes de recaer en la comuna-, además de haber estado con El Colo en todos sus cargos previos: en 2012 pasó por el Ministerio de Medio Ambiente junto a él, un año después llegó al Senado y luego al Ejecutivo de la Capital.
Es tal la confianza de Santilli en él que lo colocó como vicepresidente de la juventud del Pro Nacional y le dio lugar a que su tío, Eugenio Lacanette, disputara la intendencia de San Andrés de Giles. Sin dudas que su presencia dentro del gobierno de la Ciudad es contundente y sus vínculos serían la garantía para su tranquilidad, por sobre su falta de experiencia y gestión al frente de la Comuna.
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Sin ir más lejos, fue en la Comuna 1 donde peor manejo habría hecho la Ciudad de la pandemia de COVID-19 y nadie reparó en el accionar de Portela y los suyos. En igual sentido, más de uno repara en la inacción de la Comuna ante el presunto avance de la droga y el narcotráfico en la Villa 31.
El trágico homicidio ocurrido ayer en la zona de Retiro puso de relieve nuevamente la compleja situación de la Comuna. ¿Seguirá contando con la banca de Santilli tras este hecho o se empieza a pensar en cambios?
